Subjectivity, representation and reintegration in Colombia and Northern Ireland
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Desde 2012 en La Habana, Cuba se lleva a cabo una negociación política entre el gobierno colombiano del presidente Santos y la cúpula de la guerrilla de las FARC. Los cambios políticos e institucionales que requiere dicha negociación se harán una vez firmada la paz entre ambas partes, y una vez se dé inicio al proceso de desmovilización de los combatientes, hechos que tendrán lugar en 2017. La dejación de las armas, la concentración de los combatientes, la constitución del Tribunal especial que habrá de juzgar los crímenes cometidos por la guerrilla, entre otros, son temas que están aún por definir. El proceso de paz en Irlanda del Norte se inició a partir del cese al fuego decretado tanto por los rebeldes republicanos del IRA, como por los paramilitares protestantes en 1994. A partir de ese momento se abrió el camino para las negociaciones posteriores entre el gobierno británico, el gobierno irlandés y los partidos políticos de Irlanda del Norte.En 1998 se firmó el acuerdo de paz conocido como Good Friday Agreement, acuerdo que fue avalado por una amplia votación. El desfase temporal entre los dos procesos de paz, las similitudes y diferencias que se perciben entre los dos casos, pero sobre todo la existencia de valiosos materiales que recogen los éxitos y los fracasos de la reinserción de excombatientes en Irlanda del Norte permitirán observar, a la manera de un espejo, lo que está ocurriendo y está por ocurrir en Colombia con los ex combatientes de las FARC.
Since 2012 in Havana, Cuba conducts a political negotiation between the Colombian government of President Santos and the top of the FARC guerrilla. The political and institutional changes required for this negotiation will be made once the peace between both parties is signed, and once the process of demobilization of the combatants begins, which will take place in 2017. The laying-down of arms, the concentration of combatants, the constitution of the special tribunal that will judge the crimes committed by the guerrillas, among others, are issues that have yet to be defined. The peace process in Northern Ireland began with the ceasefire decreed both by the republican rebels of the IRA and by the Protestant paramilitaries in 1994. From that moment on, the way was opened for subsequent negotiations between the British government, the Irish government and the political parties of Northern Ireland.In 1998, the Good Friday Agreement was signed, backed by a broad vote. The time lag between the two peace processes, the similarities and differences perceived between the two cases, but above all the existence of valuable materials that reflect the successes and failures of the reinsertion of ex-combatants in Northern Ireland will allow us to observe, in the manner of a mirror, what is happening and is about to happen in Colombia with the ex-combatants of the FARC.
