Determine the social strategies associated with environmental fluctuations in a cave population located in the High Andean Forest
Grant
Overview
Affiliation
Research
View All
Overview
abstract
One of the most pressing questions in ecology is to understand how species respond and can adapt to changes in the environment. The ability to respond to these environmental fluctuations depends largely on the genetic and phenotypic variability present in the population. These changes represent a challenge for individuals and threaten the resilience and persistence of populations, especially under current conditions where changes are occurring at accelerated rates. Group life, a characteristic of many vertebrate species, is an adaptive response that emerges in response to environmental conditions (Alexander 1974). However, different environmental factors can lead to differences in social systems resulting in great variability not only between but within species. Moreover, social systems (composition, organization and structure) also vary between and within a population (Lott 1991). For example, the social system of the African striped mouse (Rhabdomys pumilio) varies according to environmental conditions: in the dry season they form groups while in the rainy season they are solitary (Schradin et al. 2006). However, our knowledge about the processes that give rise to this variation in social systems is still limited (Schradin 2013). Understanding this relationship allows us to explore the ecological mechanisms that enable populations to respond to environmental fluctuations. These changes in social context can affect demographic parameters that, in turn, can influence population growth (Vandenbergh 1987). For example, strong social ties can affect the survival of individuals (Silk et al. 2009, 2010) and can have effects on population dynamics (Sutherland 1996). In this way, social context becomes a selection factor, which can influence the behavioral and reproductive strategies of individuals (Cockburn 1987). However, the relationship between group size, composition and social relationships in fitness is incomplete (Silk 2007). For this reason, it is relevant to investigate the social strategies associated with environmental fluctuations that allow us to understand, on the one hand, ecological and evolutionary causes of sociality, and on the other hand, the resilience mechanisms of a population. Understanding the relationship between the social system, ecology and population dynamics is important to understand how species can adapt to changes in the environment, which is particularly important given the accelerated rates at which change is occurring.
Uno de los interrogantes más apremiantes en ecología es entender cómo las especies responden y pueden adaptarse a cambios en el ambiente. La capacidad para responder a estas fluctuaciones ambientales depende en gran medida de la variabilidad genética y fenotípica presente en la población. Estos cambios representan un reto para los individuos y amenazan la resiliencia y persistencia de las poblaciones, especialmente, en condiciones actuales, en las que los cambios están ocurriendo a tasas aceleradas. La vida en grupo, una característica de muchas especies de vertebrados, es una respuesta adaptativa que surge como respuesta a las condiciones ambientales (Alexander 1974). Sin embargo, diferentes factores ambientales pueden dar lugar a diferencias en los sistemas sociales dando lugar a una gran variabilidad no solo entre sino dentro de las especies. Más aún, los sistemas sociales (composición, organización y estructura) también varían entre y dentro de una población (Lott 1991). Por ejemplo, el sistema social del ratón rayado africano (Rhabdomys pumilio) varía de acuerdo con las condiciones ambientales: en época seca forman grupos mientras que en época de lluvias son solitarios (Schradin et al. 2006). Sin embargo, nuestro conocimiento acerca de los procesos que dan lugar a esta variación en los sistemas sociales es aún limitado (Schradin 2013). Entender esta relación, nos permite explorar los mecanismos ecológicos que le permite a las poblaciones responder a las fluctuaciones ambientales. Estos cambios en el contexto social pueden afectar parámetros demográficos que, a su vez, pueden influenciar el crecimiento poblacional (Vandenbergh 1987). Por ejemplo, la fortaleza de los lazos sociales puede afectar la supervivencia de los individuos (Silk et al. 2009, 2010) y puede tener efectos sobre la dinámica poblacional (Sutherland 1996). De esta forma, el contexto social se convierte en un factor de selección, que puede influenciar las estrategias comportamentales y reproductivas de los individuos (Cockburn 1987). Sin embargo, la relación entre el tamaño de grupo, la composición y las relaciones sociales en el fitness, es incompleto (Silk 2007). Por esta razón, es relevante investigar las estrategias sociales asociadas a las fluctuaciones ambientales que nos permite entender, por un lado, causas ecológicas y evolutivas de la socialidad, y por otro, los mecanismos de resiliencia de una población. Entender la relación entre el sistema social, la ecología y la dinámica de poblaciones, es importante para entender cómo las especies pueden adaptarse a cambios en el ambiente, lo cual es de particular importancia dadas las tasas aceleradas a las cuales está ocurriendo el cambio.
